El don de mi hermana

Renesmee POV

Bajamos del auto y corrimos a nuestra cabaña donde se encontraban Carmen y Eleazar. Mis recuerdos de ellos no eran muy nítidos ya que era una bebe cuando los conocí, pero mas o menos podía recordarlos a todos aquellos que arriesgaron sus vidas por mi. Sabía que los Denali eran "vegetarianos" como nosotros y que Eleazar tenía el don de saber que don tenían los otros vampiros. Un detalle que me desagradaba de ese aquelarre era que Tanya estaba enamorada de mi padre. De esto me entere por medio de tía Rose y mi padre creía que yo desconocía este detalle. Pero Carmen Denali me caía muy bien, ella fue la primer vampira, que no era de mi familia, que me acepto sin problemas cuando me conoció. Hacían pasado años desde la visita de los Vulturis, osea que hacia años que no los veía…

Cuando entramos, allí estaban. Seguían tan hermosos como los recordaba.

-Hola, chicas-saludo papá-¿la pasaron bien con Alice?

-Tu que crees-le respondí haciendo una mueca.

-Hola, Nessie-dijo una voz femenina-¿te acuerdas de mi?

-Carmen-dije y corrí a abrazarla.

-Veo que has crecido mucho pequeña. Aun recuerdo cuando eras una bebe, eras tan pequeña y ahora, mírate.

-Te he extrañado mucho-dije y entonces recordé a Kate-oh, lo siento. Carmen ella es Katerine, prácticamente mi hermana.

-Hola, soy Katerine, puedes llamarme Kate.

-Hola, Kate, soy Carmen.

-¿Y de mi te olvidaste, Nessie?-dijo Eleazar mientras caminaba hacia nosotras-esta debe ser la nueva Cullen.

-Hola, Eleazar, ella es Katerine, prácticamente mi hermana.

-Soy Katerine, puedes decirme Kate.

-Kate, soy Eleazar, es un placer conocerte, veo que tienes un excelente don.

-Enserio, no tenia idea-dijo Kate inocente

-Es muy parecido al de Nessie-continuo Eleazar-puedes transmitir tus pensamientos a través de la vista, claro, solo si tú lo deseas.

-Bueno, nuestra misión aquí ya la cumplimos y ahora nos marchamos-anuncio Carmen.

-No, por favor, no se vayan tan pronto-les suplique.

-Lo lamento, Ness. Pero Garrett, Tanya y Kate llegaran a casa desde España y tenemos que estar para recibirlos-me explico Carmen-la próxima vez nos quedaremos todo lo que tu quieras.

-Gracias por venir-dijo mamá.

-No es nada, siempre es un honor visitarlos-respondió Eleazar.

Los abracé a ambos y luego se marcharon. Entonces recordé a Jacob y me pregunte que había pasado con el.

-Papá ¿sabes que pasó con Jacob?-pregunte.

-No quieres saberlo-dijo

-Papá ¿Qué le paso a Jacob?-insistí.

-Cuando iba a bajar del auto Alice y Rosalie lo agarraron de las manos, Emmet y Jasper las ayudaron y hasta ahora lo han estado torturando.

Cuando dijo eso salí corriendo a la máxima velocidad que podía correr pensando en las cosas que le podían hacer mis tíos a Jake. Luego de entrar me sorprendió lo que vi. Jacob estaba vestido de mujer atado a una silla, con una cinta en la boca. Mientras Emmet le sostenía la cabeza, Alice y Rosalie lo maquillaban. Al principio me dieron gana de reír, nunca creí que fueran capaces de algo así, pero luego me enoje ya que Jake era mi novio y merecía mas respeto de parte de mi familia, o por lo menos de parte de mis tíos. Cuando tía Alice me vio los miro a los demás como diciéndoles que pararan y entonces corrí hacia Jacob, lo desate y, luego, lo lleve a la antigua habitación de mi padre para que se vistiera y se sacara el maquillaje del rostro. Debía admitir, aunque me costara, que era muy divertido lo que le habían hecho, pero igual hablaría con ellos porque no iba a permitir que le hicieran esto de nuevo. Jake salio de la habitación vestido con sus pantalones y sin maquillaje, ese era mi Jake, no el Jacob torturado por mis tíos.

-Gracias, hermosa-dijo Jake.

-Perdón por llegar tan tarde. Es que estaba hablando con los Denali y se me olvido que no viniste con nosotras a la cabaña- me disculpe.

-Y ¿tiene algún don tu hermana?

-De hecho tiene un don similar al mío.

-¿Por qué? ¿Cuál es su don?

-Puede transmitir los pensamientos a través de la vista.

-Guau, cualquiera cree que son autenticas hermanas.

-Jake, esta anocheciendo. Creo que seria mejor si volviéramos ya.

-Nessie, creo que a Edward le molestaría que yo cene allí casi todas las noches.

-Tienes razón, entonces, te veo mañana-me iba a dar vuelta pero me agarro del brazo y tiro de el hasta que quede pegada a su cuerpo-pero antes una cosa mas-dijo antes de besarme de tal forma que casi se me sale el corazón del pecho. Esperaba que mi padre no estuviera "espiando" o me regañaría cuando volviera a casa. Nos separamos y el se alejo para entrar en fase. Volví corriendo a casa. Entre a casa y mi padre me vio con cara de pocos amigos.

Eso te pasa por meterte en mis asuntos-pensé sabiendo que podía oírme.

-No me culpes, teóricamente tengo 17 años, todos los adolescentes somos así-dijo, pero yo seguía muy enfadada-lo siento Ness, sabes que a veces no aguanto.

-Cuando yo era humana no me dejaba visitar a Jacob porque decía que era peligroso-agrego mamá con algo de sarcasmo al final.

-Mamá, ¿Qué hay de cenar?-le pregunte.

-Estaba pensando en ir de caza, pero si quieres te puedo preparar algo.

-No, esta bien mamá. Seria estupendo ir de caza.

-¡Kate, linda, nos vamos de caza ¿vienes?!

-Si mamá, ya voy-grito Kate desde el segundo piso y en un segundo ya estaba a mi lado.

Corrimos los cuatro hacia el bosque y en un determinado momento mi padre se detuvo.

-Aquí es perfecto-aprobó mamá.

-Bien, Kate, concéntrate y déjate llevar por tus instintos, pero con cuidado ya que Nessie tiene parte humana.

-¿Puedo ver como lo hacen ustedes? 

-Claro-dijimos los tres a la vez.

Me concentre en los olores que habían a mi alrededor, entonces capte el efluvio de una manada de ciervos a, apenas, 5 kilómetros al este. Corrí a toda velocidad seguida de cerca por mi hermana. Cuando localicé la manada, no era muy grande, pero lo suficiente para satisfacernos a todos. Me lancé contra un macho que a la vez intento defenderse, pero yo era más fuerte y mordí su garganta al primer descuido por parte de mi presa y lo vacié de sangre al instante. Cuando pude levantar la vista vi a Kate con un ciervo, ya muerto, en ambas manos, disfrutando del sabor de la sangre. Me alegraba que aprendiera a cazar y que ya no sufriera como cuando estaba con su padre. Entonces me pregunte si Kate no tenia hermanas biológicas como el semihumano que conocí cuando era pequeña, creo que se llamaba Nahuel. No quería pensar en eso, no quería recordar los rostros que me atormentaban de pequeña. Los rostros de lo vampiros Aro, Marco y Cayo, con sus esposas y la guardia. Los odiaba de verdad ya que ellos habían intentado matarme. Intente olvidarlos pensando que era buenísimo que Kate tuviera un don muy similar al mió. Entonces escuche la voz de mi padre.

-Volvamos a casa, ya es suficiente por hoy.

-Ya vamos papá-dije haciéndole señas a Kate para que abandonara la caza.

Corrimos a nuestra cabaña y nos acostamos temprano a dormir ya que mañana comenzaríamos el colegio…